Cuatro meses después de la reanudación de los juegos públicos y la vuelta a la actividad comercial, la situación de la red profesional de administradores de lotería es muy preocupante, a tenor de la evolución de las ventas de estos últimos meses y de la percepción de los propios loteros. 

Preguntados recientemente por ANAPAL en una encuesta desarrollada por el Departamento de Estudios de la Asociación, los loteros arrojan unas cifras de venta ‘desalentadoras’ que van en la línea de la importante bajada de las ventas ya conocida: un descenso del 15% en el total de los juegos en este periodo (junio a septiembre) en comparación con las ventas de 2019. Además las previsiones del Sorteo de Navidad no pueden ser más negativas según dicha encuesta.

Con estos datos aportados por los propios administradores de lotería y los datos de ventas de SELAE, se ha elaborado el Informe de la evolución de las Ventas de Lotería Nacional-Previsión Ventas del Sorteo de Navidad 2020, que daremos a conocer próximamente. En él se recoge un exhaustivo estudio sobre el comportamiento de los juegos y en especial las previsiones de ventas del Sorteo de Navidad de este año. 

Con estas cifras reales de las ventas durante el período post confinamiento y la previsión de ventas del Sorteo de Navidad, podemos concluir algo que ya avisamos: nuestra campaña más importante va a verse muy seriamente afectada por la crisis del coronavirus. Y lo que es peor, corre grave riesgo la aportación de los más de 2.300 millones de euros que SELAE da a las arcas públicas y los 12.000 empleados que generan  las Administraciones de Loterías.

Este informe ya ha sido entregado a SELAE y estamos a la espera de una contestación por su parte. Como consecuencia de los datos obtenidos, hemos solicitado de forma urgente la reunión de la Comisión de seguimiento económico que se creó a instancias de ANAPAL, en el acuerdo de 9 de mayo de 2020, con el fin de evaluar las medidas necesarias para proveer a las administraciones de loterías de la capacidad económica necesaria para poder afrontar la gestión del Sorteo de Navidad y las previsibles pérdidas que en la gestión de los juegos se producirá en 2020.